“Eso no está contemplado (el llamado al embajador Ruy Pereira). El Gobierno ya se manifestó contra actos extremos y no es el caso de dar más extensión a ese episodio”, señaló García en una entrevista con el diario O Estado de São Paulo.
El Gobierno de Brasil lamentó el jueves por medio de una nota oficial divulgada por la Cancillería los incidentes ocurridos y afirmó que “son inaceptables los actos hostiles contra parlamentarios brasileños”.
El viernes, la Cancillería brasileña convocó a la embajadora de Venezuela en Brasilia, María Lourdes Urbaneja, y el ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira, pidió explicaciones a su homóloga venezolana, Delcy Rodríguez, sobre el incidente con el grupo de senadores brasileños que estuvieron el jueves en Caracas.
Venezuela, por su parte, negó ayer haber obstaculizado la visita al país de un grupo de senadores de oposición brasileños y acusó a “grupos de la derecha nacional e internacional” de intentar construir una “maniobra mediática a partir de mentiras”.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Venezuela atribuyó el bloqueo durante varias horas de la autopista que une el aeropuerto de Maiquetía con Caracas al “volcamiento de una gandola (un gran camión con remolque) cargada con sustancias inflamables”.
Los incidentes registrados en Caracas han causado revuelo durante los últimos días en el Congreso brasileño y la Cámara de Diputados aprobó el jueves de urgencia una moción de censura contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Sin embargo, el principal asesor de Rousseff calificó la visita de los senadores opositores como inoportuna y un acto de “proselitismo”. “Si uno está en un depósito de pólvora, no entra fumando y mucho menos enciende un fósforo”, dijo García.