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En la administración de Eduardo Paniagua (ANR) también se repartió a diestra y siniestra los recursos de la municipalidad a los pastores y sacerdotes amigos, de acuerdo a los datos.
Por su parte, el intendente Carlos César Haitter al ser consultado sobre el motivo de la concesión del dinero a las iglesias tanto evangélicas como católicas dijo que es para la “formación espiritual de los jóvenes” en una “zona fronteriza de alto riesgo” y que lo “volvería a hacer” si se le da la oportunidad. “Para mí es un comentario de concejales que no están de acuerdo (con dar dinero a las iglesias). No sé si se da esta situación en otros lugares, pero en Salto la iglesia es la responsable de la formación espiritual de los jóvenes”, justificó.
Al ser requerido sobre el por qué no se usa ese dinero, por ejemplo, en escuelas, respondió que la Municipalidad de Salto del Guairá invierte en estructura edilicia el doble del dinero que recibe del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide).
El jefe comunal agregó que profesa la religión católica, pero que no por eso deja de lado a otras congregaciones cuando presentan los pedidos de ayuda.