Proceso de producción de la celulosa kraft blanqueada
Los trozos de madera son descortezados y luego reducidos a astillas en los astilladores de cada fábrica. Dichas astillas son transportadas a través de correas a reactores, denominados digestores. En ese sitio se cuece con soda cáustica, sulfato sódico y carbonato cálcico, a 200 grados centígrados y alta presión para reducir los trozos a una pulpa, en una solución de licor blanco compuesto por hidróxido de sodio y sulfuro de sodio. Esta operación permite disolver gran parte de la lignina que une a las fibras de madera, liberando así dichas fibras. Después de la cocción, se separan los gases sulfúricos para ser tratados (generalmente son incinerados), y el resto de la mezcla es filtrado por diferentes mecanismos para retirar los trozos que no se han degradado durante la cocción.
19 de noviembre de 2014 - 22:11
Este artículo tiene 10 años de antigüedad El producto de la cocción se procesa en filtros lavadores, mientras que la pulpa es enjuagada con agua para arrastrar los líquidos de cocción y recuperar los compuestos químicos utilizados. La pasta es filtrada y espesada al quitarle agua, donde se separan las fibras y el licor residual (licor negro). La pulpa obtenida se clasifica, limpia, espesa y almacena.
Para el caso de celulosa blanqueada, la pulpa obtenida es enviada a una etapa de blanqueo en la que se utilizan diferentes combinaciones de compuestos oxidantes tales como cloro elemental (Cl2), dióxido de cloro (ClO2), peróxido de hidrógeno (H2O2), oxígeno (O2), u otros agentes, para finalmente almacenarse. Por otra parte, el licor negro se envía a un ciclo de recuperación de reactivos, donde se obtiene energía para el proceso y se recicla una fracción importante de los insumos químicos requeridos en el pulpaje.