Una gran cantidad de bovinos están en campos inundados por la crecida de los ríos, que afectan las zonas. Por la imposibilidad de sacar los animales a causa de esta situación, los ganaderos ya están desesperados.
Los bovinos prácticamente tienen que “nadar” para llegar a sitios más altos y muchos ya murieron. Asimismo, a la vera de la ruta se podían ver camiones transganado que esperaban a que las vacas y caballos lleguen hasta la orilla para ser llevados a sitios más altos.
Los caminos, además, se encuentran intransitables por lo que el ingreso de camiones resulta imposible.
Los pequeños ganaderos deben aguardar que mejore el tiempo para poder ingresar y trasladar a los animales.
Esta situación afecta además a la comercialización de las reses por lo que los ganaderos están con problemas para cumplir con sus compromisos financieros.