Obras innecesarias e inconclusas del intendente de General Bruguez

El intendente de General Bruguez, Reinaldo Silvera (ANR), pagó por obras innecesarias e inconclusas. La comunidad está en la miseria, sin caminos de todo tiempo ni servicios básicos, pero el jefe comunal no tuvo mejor idea que construir un ruedo para corridas de toros e iluminó un baldío que llama estadio de fútbol.

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GENERAL BRUGUEZ, Dpto. de Presidente Hayes (Juan Jara, corresponsal). Una de las denuncias contra el mal manejo del intendente de esta ciudad, Reinaldo Silvera, señala el innecesario gasto de G. 200 millones en la construcción de un “majestuoso” ruedo para corridas de toros.

Mientras Silvera considera que esa millonario erogación permitirá mantener vigente la “tradición”, su obra está a escasas cuadras del colegio nacional de esta comunidad donde los alumnos ni siquiera disponen de un sanitario decente.

Una vergüenza es el contraste de la ciudad. La comunidad proyecta una deplorable imagen y es así como lo ven sus pobladores que no se animan a alzar la voz por temor a represalias del “prepotente” jefe comunal que vive en Mariano Roque Alonso (Dpto. Central) y cada cierto tiempo se traslada al distrito, que está a 200 kilómetros de Asunción.

El jefe comunal destaca el ruedo para corridas de toros como uno de los grandes “avances” de la ciudad durante su gestión. En realidad es una bofetada para los modestos habitantes de la comunidad chaqueña, según acusan sus detractores que cada vez más crece en número.

Entre otras obras municipales, figura un tinglado multiuso, cuya construcción costó unos G. 90 millones.

Además, la ciudad no cuenta con caminos de todo tiempo, pero Silvera decidió que era mejor tener lumínica en un sucio baldío, donde funcionan una plaza y un “estadio de fútbol” sin graderías. En esta innecesaria obra demandó unos G. 30 millones, según Silvera.

Obras inconclusas

Además de las obras innecesarias que ahora están en lamentables condiciones de abandono, existirían obras fantasmas, mientras otras están inconclusas, de acuerdo a las denuncias. Este es el caso de un matadero y un tajamar en el barrio Costa Sur que supuestamente costaron G. 30 millones, pero en la zona no se tienen vestigios de estas construcciones.

En el año 2010, el intendente Silvera pagó G. 117 millones por la construcción de un gallinero en el área urbana de esta comunidad. La instalación de la infraestructura para cría de aves nunca terminó, está en completo estado de abandono y sin ninguna utilidad.

Según los pobladores, el costoso e inservible “corral” de Silvera hasta se desplomó en reiteradas ocasiones. Pero, días antes de la visita realizada hace un mes por representantes de la Contraloría General de República CGR), empezaron la reconstrucción de unos de los galpones con materiales nuevos y postes de karanda’y, comentaron.

Sin documentos

Los nueve concejales municipales de General Bruguez sesionan una vez al mes, pero cobran más de G. 1 millón. No viven en el distrito y no tienen a la vista ninguna documentación de las innecesarias e inconclusas obras.

La concejala Nilda Correa (PLRA), no supo dar información sobre las obras encaradas por Silvera. “Nosotros no tenemos ningún documento. Todo lo tiene el intendente, él prácticamente nos tiene relegados a nosotros”, dijo la edil, que no ocultó cierto temor hacia Silvera.

La Municipalidad de General Bruguez maneja un presupuesto anual promedio de G. 2.000 millones. Sin embargo, la ciudad con unos 5.000 habitantes, está sumergida en el completo estado de abandono y la miseria. No cuenta ni con los servicios básicos y parece una ciudad fantasma del departamento de Presidente Hayes.

PRÓXIMA NOTA: Falta de gestión evidencia el estado de abandono.

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