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CARLOS ANTONIO LÓPEZ, Itapúa (De nuestra redacción regional).Los pobladores denuncian que con frecuencia sufren afecciones respiratorias provocadas por el vertido de gases al aire realizado por la usina térmica de la pastera Alto Paraná. Esta opera en la vecina ciudad de Puerto Piray, Argentina.
Dijeron a los representantes de la Conaderna, dependiente de la Cámara de Senadores, que además de afectar a la salud, la emisión de gases dañan los cultivos, que sería consecuencia de la contaminación del aire.
El asesor jurídico de la Comisión, Abog. Hugo Florentín, señaló que visitaron la localidad para recabar más información sobre las denuncias hechas por los pobladores, así como las publicaciones hechas por este diario sobre la contaminación del ambiente, que estaría causando la empresa procesadora de pasta de celulosa.
Dijo que habrá que poner en funcionamiento los mecanismos legales para que se resuelva el problema.
“La contaminación del aire traspasa la frontera, afecta a nuestra población y la Comisión tiene la obligación de poner en funcionamiento todo el protocolo diplomático para que nuestro país reclame ante las autoridades argentinas este hecho”, afirmó Florentín.
Los habitantes de Puerto 7 de Agosto, lado paraguayo, explicaron a la comitiva los problemas que genera el humo que constantemente despide la caldera de la planta Alto Paraná, ubicada a unos 2.000 metros, del otro lado del río Paraná, aguas compartidas por Paraguay y Argentina.
Máximo Duarte, un antiguo poblador, dijo que la picazón en la nariz y garganta son constantes, especialmente cuando sopla el viento desde el cuadrante sureste, que es el lugar hacia donde está ubicada la planta industrial.
Otro poblador, Ignacio López, comentó que tiene su vivienda a cinco kilómetros del río, y aún así el impacto del aire contaminado afecta incluso a las plantas, como el mango y cítricos.
Es frecuente que los objetos sean cubiertos por un polvillo blanco, refirió.
Durante un recorrido en lancha, proporcionada por la Marina paraguaya, los técnicos observaron el lugar donde la empresa Alto Paraná realiza el vertido de sus residuos químicos al cauce del río.
La comitiva también se reunió con la intendenta, Silvana González (ANR), quien pidió a las autoridades rápida solución al conflicto.