Cargando...
Miembros de los sindicatos “Sintra”, “Sintibir” y el “Yvytu Pyahu” consideran que la muerte del topógrafo Carlos Perrens, ocurrida el viernes pasado, es consecuencia de la irresponsabilidad e imprevisión de Cárdenas y su equipo directivo. Por eso realizarán la asamblea, de modo a sentar postura respecto al caso y exigir condiciones adecuadas en los viajes para que no se repita este tipo de tragedias.
Según los datos, Perrens fue enviado con dos empleados más para un operativo en el marco del canje de tierras chaqueñas por Chino Cue (Alto Paraná), pero tras descomponerse su vehículo y ante la falta de radios, el topógrafo se desprendió del grupo y caminó 50 km en busca de ayuda, pero falleció en el camino. Su cuerpo fue hallado sin vida al día siguiente en Nueva Asunción, zona Miguelete, del distrito citado, a unos 315 km al norte de Filadelfia.
El Ing. Lino Ávila, funcionario con 23 años de antigüedad del Indert, informó ayer a nuestro diario que la comitiva fue a realizar la verificación en el Chaco, no solo sin radio y en una camioneta no apta para el trabajo, sino también sin viático y sin seguro de vida.
Dijo que anteriormente existía un departamento de Radio Comunicación en el ente, pero fue desmantelado por orden de Cárdenas, tras diferencias con el encargado del área. “Este señor (por el presidente) en todas sus acciones nos está exponiendo. Ahora ocurrió lo de Carlos Perrens, pero esto se veía venir por la forma irresponsable que está manejando la institución”, agregó.
Sin mantenimiento
Según lo resaltado, en la institución no se destinan los fondos suficientes para el mantenimiento de los vehículos que viajan al interior, razón por la cual a menudo hay accidentes. “Las condiciones en las que están los vehículos son lamentables. A eso se le suma que el funcionariado vive en una situación de miedo, acogotado por presiones y amenazas, en medio del terror”, destacó.
De acuerdo con una versión no oficial, en el Indert se obliga a los choferes a que ellos corran con los gastos para mantener las camionetas, mientras que las lujosas y de mejor estado se destinan para el uso de Cárdenas y su entorno.
En principio, la disposición para hacer el trabajo era que viaje otro técnico, de nombre Gustavo Caballero, pero ante el rechazo de este trabajador por mal estado de salud, la tarea quedó a cargo de Perrens, con las consecuencias conocidas.
La directora de la Región Occidental del Indert, María José Acuña, explicó a ABC que la comitiva viajó al chaco en dos camionetas, pero una de ellas se separó, pues sus tres tripulantes tenían previsto volver a Asunción al día siguiente y quisieron estar más cerca de la ruta de salida.
Dos muertes en un mes
En el último mes, además del caso que tuvo como víctima a Perrens, también falleció otro funcionario del ente rural de nombre Florencio González Fariña, que conducía una camioneta en la Ruta X y volcó a la altura del kilómetro 255, en la zona de Yasy Cañy, departamento de Canindeyú.
Ayer intentamos tener la versión del titular del Indert, pero no respondió nuestras llamadas a su celular, con terminación 211. Cárdenas no habla con ABC desde inicio de este año, precisamente a raíz de las denuncias sobre irregularidades en el caso Chino Cue.
El caso Chino Cue
El Indert acordó en febrero de este año entregar 60.269 Ha. del Chaco a la empresa Tierra de Negocios SA, de los empresarios Sarabia, que se presentaba como dueña de 10.300 Ha. de Chino Cue (Alto Paraná). La idea era supuestamente permutar las tierras como indemnización a dicha compañía, debido a que parte de la propiedad altoparanaense había sido expropiada a través de dos leyes.
Se estableció el valor de la transacción en US$ 13,7 millones y el acuerdo de “canje” incluyó el pago en efectivo más intereses, si el Indert no consigue las tierras chaqueñas. De ahí el apuro y el afán de la administración del ente de conseguir a como dé lugar los inmuebles.