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Según explica este movimiento, una parte de la finca en cuestión, de 8.650 hectáreas en total, se encuentra en desuso, constituyéndose así en un latifundio improductivo, que según el Art. 116 de la Constitución Nacional debe eliminarse progresivamente.
El MCP también denuncia que otras fracciones de esa finca están siendo utilizadas, legal e ilegalmente, por grandes ganaderos y empresarios, alguno de los cuales tiran en la zona basura altamente contaminante.
7 años sin respuesta
La solicitud de constitución de un asentamiento modelo en esta localidad del Bajo Chaco, actualmente ocupada por los miembros del MCP, data del año 2008, y hasta la fecha se encuentra sin respuesta.
Según finaliza el comunicado de la organización campesina, ante la necesidad de trabajar para sacar adelante a sus familias, los compatriotas tomaron la decisión de ocupar el predio con el fin de lograr que esta propiedad del Estado cumpla con su función social, acorde con lo establecido en la ley y la Constitución Nacional, por lo que aguardan celeridad por parte del Indert.