Cargando...
Entre los acreedores afectados por la quiebra de la Cooperativa Cooperalba se encuentran el Banco Regional, por más de US$ 6 millones; la Central de Cooperativas (Cencopan), US$ 1,4 millones, y el banco Itaú, por US$ 1,3 millones, entre los de mayor porte en el sistema financiero. También figura entre los afectados, la firma Ecop, de propiedad cooperativa, a la cual se adeuda la suma de US$ 1,8 millones, de acuerdo con los datos proveídos por los interventores.
ABC Color intentó obtener las reacciones de los bancos afectados por préstamos otorgados a Cooperalba, pero sus representantes alegaron que deben ceñirse al secreto bancario, por lo que no brindaron mayores detalles sobre las acciones que van a tomar para la recuperación de la inversión. En cuanto a Cencopan, se supo que los dirigentes realizaron la denuncia en la justicia y ahora aguarda fecha para el remate de los bienes de la entidad, detalló su titular, Pedro Loblein.
Según el reporte, la suma adeudada por Cooperalba a sus diferentes acreedores supera los US$ 26 millones, mientras que el proceso de recuperación de estos valores queda en manos de la comisión liquidadora, que pudo conformarse finalmente a fin del mes pasado.
Cabe señalar que una comisión anterior fue anulada por el Instituto Nacional de Cooperativismo (Incoop), ya que parte de este equipo que debe dirigir el proceso de liquidación lo integraron las mismas autoridades ahora cuestionadas en la administración de la cooperativa. La nueva comisión quedó conformada por Luis Emilio Cuevas en representación del Incoop, y los señores José Norberto Joench, Juliandro Carrer y Rivelino Heerdt en representación de los socios de la cooperativa.
Los perjudicados aguardan ahora la convocatoria, a fin de proceder judicialmente en la recuperación de los valores invertidos en la quebrada entidad.
Sin embargo, una maniobra de sus dirigentes para la venta irregular y traspaso de sus bienes incrementa la preocupación de los acreedores.
En ese sentido, una intervención, el Incoop detectó la venta irregular de la fábrica de almidón y otros bienes de la entidad solidaria a la firma Productores Asociados del Paraguay (Proapy SA), que llamativamente es dirigida por Eloi Roque Canossa y Omar Esteban Depps, que son también el presidente y el gerente de Cooperalba, respectivamente.
La transacción se realizó en diciembre de 2014, por un importe de US$ 7.500.000 que se materializaron en dos contratos, pero la entidad no recibió importe alguno como contrapartida de la operación.
Sin embargo, tras el ingreso de la comisión interventora, las gestiones realizadas no fueron suficientes para recuperar la entidad, debido al elevado nivel de deterioro de la liquidez, alto endeudamiento, débil gestión y ocultamiento de datos relevantes, que llevaron a la determinación de conformar la comisión liquidadora que fue aprobada la semana pasada en asamblea. Al cierre del 2015, la entidad arrastraba ya una pérdida acumulada de US$ 11.400.000.