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El titular del ente monetario central, Carlos Fernández Valdovinos, destacó ayer en conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno que el nivel de reservas con que cuenta el país es suficiente para hacer frente a cualquier situación adversa que se pueda presentar a nivel interno y externo con el tipo de cambio. “Paraguay está muy bien; como nunca tenemos un nivel de reservas elevadísimo, casi 20% del PIB”, resaltó el titular tras una reunión que mantuvo con el presidente de la República, Horacio Cartes, en el Palacio de López.
“Tenemos fundamentos sólidos para defendernos de esto. No somos inmunes, porque ningún país del mundo es inmune, pero sí tenemos instrumentos para hacer pasar este mal tiempo”, resaltó el titular del ente monetario central en relación con la apreciación del dólar frente a la moneda local.
Recordó que las reservas no están ahí para tirar y fijar el tipo de cambio, pero que se pueden disponer para cortar picos que se podrían dar, como ocurrió en las últimas semanas. El BCP inyectó poco más de US$ 100 millones en menos de un mes, de los cuales US$ 25 millones correspondieron solo a los dos último días.
La divisa norteamericana llegó a su nivel máximo el pasado miércoles, desde noviembre de 2010, al cotizar a G. 4.730, ante la expectativa por las decisiones de la Reserva Federal de EE.UU., que resolvió reducir otros US$ 10.000 millones a los estímulos monetarios de dicho país.
Como el anuncio de la Fed se enmarcaba dentro de lo esperado por los mercados globales, el tipo de cambio no sufrió mayores variaciones ayer. Así, en el mercado local, el dólar estadounidense retrocedió 10 puntos y se cotizó en promedio a G. 4.670 en la compra y G. 4.720 en la venta.
Ganadores y perdedores
Fernández Valdovinos señaló que en el mercado de cambios siempre hay ganadores y perdedores, y que probablemente el importador salga algo perjudicado en este contexto; en cambio, al exportador le beneficiará.
“Vamos a tener un fortalecimiento del dólar, pero no quiere decir que la moneda americana se nos va a salir de control. Es una tendencia mundial, pero no sería un movimiento abrupto como el que registró la Argentina, que tuvo que depreciar fuertemente su tipo de cambio físico”, dijo finalmente.