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Comerciantes consultados indicaron que las ventas bajaron en un 50% y por eso se teme la instalación de las tiendas free shops, anunciado en el lado brasileño, lo que haría que las ventas bajen aún más y hasta podría derivar en la desaparición de numerosos empleos en el lado paraguayo.
Felipe Cogorno Álvarez, representante de la Cámara de Comercio del Amambay en las negociaciones con el Ministerio de Hacienda, indicó en una entrevista reciente que “existe actualmente una necesidad enorme de un reajuste en el tema de los impuestos, a fin de que los comercios de frontera puedan seguir siendo competitivos”.
Por su parte, Tomás Medina, de la Cámara de Comercio de Pedro Juan Caballero, señaló que actualmente el futuro del comercio fronterizo “es bastante incierto, el enorme bajón en las ventas golpea duramente a todos los comerciantes y esto repercute en todos los sectores de la sociedad”.
Lentas negociaciones
Representantes de los comercios de Ciudad del Este, Salto del Guairá y Pedro Juan Caballero expusieron hace varias semanas al viceministro de Tributación, Fabián Domínguez, la preocupación por la habilitación de los free shops en las ciudades brasileñas.
Señalaron al viceministro Domínguez que las tiendas en el lado brasileño funcionarán con una carga tributaria menor que en el territorio paraguayo. Los free shops brasileños tendrán un impuesto de 6% para los productos importados y apenas 3% en los productos nacionales, cifras que están muy por debajo de los impuestos en Paraguay, que van del 10% al 35%.
Ante esta situación, los comerciantes paraguayos, solicitaron al Ministerio de Hacienda la eliminación del Impuesto Selectivo al Consumo para aquellos productos que sean vendidos a los extranjeros, así como la eliminación del IVA sobre los artículos vendidos a estos mismos clientes y la ampliación del listado de los productos exentos de impuestos dentro del Régimen de Turismo. Pero las negociaciones son lentas, lamentan los comerciantes.