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Se trata de una producción editorial que ABC Color publicó entre los años 2003 y 2004, con el mismo autor de esta colección, Jorge Rubiani.
Dentro de esta saga histórico-literaria, la obra se completará con un tercer tomo completamente inédito, el número 6 de esta colección.
En la presentación de aquella primera edición, Rubiani ya nos enfrentaba el hecho que los paraguayos habíamos eliminado progresivamente las huellas de nuestro pasado con la ilusoria intención de alinearnos al “progreso”, o en pos de parecer “modernos”.
En ese propósito –explica el autor–, “no solo se demolieron edificios de indiscutible valor histórico, sino se extraviaron documentos, perdido libros, fotografías y objetos diversos, asociados todos ellos a nuestra cultura y nuestra historia”.
De este análisis nace el sustento motivador de estas “Historias secretas...”, porque la depredación cultural trajo también aparejado el olvido a los actores y protagonistas de nuestro pasado, junto a otros ingredientes des –educativos y tecnológicos–, que terminaron con la saludable costumbre de recoger y registrar las vivencias que palpitan en la mente de muchos “viejitos” que se van yendo sin tener la oportunidad de transmitir su legado.
Estos “protagonistas de un tiempo en que la conversación bajo las enredaderas, en los corredores de las casas o alrededor del fogón hicieron posible la continuidad de un saber que no está en los libros (...) y todavía están ahí, arrinconados, condenados al silencio o al intercambio de algún escueto y obligatorio saludo.
Esperando por nosotros, tal vez a la sombra de alguna amorosa protección, pero desprovistos de la atención que necesitan para cumplir con el ritual de ‘comunicar’ lo que ellos protagonizaron o recibieron como valiosa información de sus mayores”.
De estas Historias secretas del Paraguay, primer tomo, material que ABC Color pondrá en sus manos el próximo domingo 2 de febrero, se tienen pocas noticias porque tal vez no se leyeron bien los libros que las mencionan; o porque se omitieron de los textos y aulas escolares en beneficio de la brevedad de los programas de enseñanza.
O porque rescata hechos y acontecimientos olvidados o ignorados, de personajes o sucesos menores que complementaron los grandes hechos de nuestra historia. Los que provienen del testimonio de un gran número de personas que lograron conservar vivencias de indiscutible valor y entre los que se mezclan el drama, el humor, tiendo como telón de fondo la “gran historia” que todos admiramos.