Consumo local de energía eléctrica sufriría un acentuado bajón este año

La tasa de consumo de energía eléctrica en el mercado paraguayo (Sistema Interconectado Nacional) crecerá este año en torno al 6%, según fuentes técnicas independientes, muy por debajo de la que se alcanzó en 2024, que saltó al 18,3% ,y a pesar del optimismo del presidente de la ANDE, Ing. Félix Sosa, quien hace unos días no dudó en sostener que en este ejercicio se tendrá una tasa parecida.

Un mayor y mejor aprovechamiento de la aún abundante energía eléctrica con la que cuenta el país también depende del fortalecimiento de sus redes de transmisión y distribución.
Un mayor y mejor aprovechamiento de la aún abundante energía eléctrica con la que cuenta el país también depende del fortalecimiento de sus redes de transmisión y distribución.gentileza

El Ing. Félix Sosa, en el marco de una reciente exposición ante miembros del Centro de Regulación, Normas y Estudios de la Comunicación (Cerneco), explicaba que la tasa del ejercicio precedente fue “única a nivel global”.

“No existe un lugar en el mundo donde se haya registrado 18% de aumento de consumo de energía eléctrica en un año”, enfatizaba el funcionario.

Acerca de los factores que catapultaron este indicador, el Ing. Sosa apuntó lo siguiente: “responde a un mejor aprovechamiento de los recursos nacionales, siempre hablábamos de que tenemos que usar nuestra energía en Paraguay, bueno se está aumentando bastante el consumo interno”, dijo.

A su laudatoria referencia al ritmo de crecimiento de la demanda el año pasado, Sosa aseguró ante sus anfitriones de turno que para este año, 2025, esperan que la demanda alcance un incremento del mismo orden, o sea, de nuevo alrededor del 18%.

Pronóstico sin fundamentos numéricos firmas

La explicación oficial del máximo responsable de la empresa eléctrica estatal; sin embargo, no convence a todos. Es más, si consideramos los datos del Viceministerio de Minas y Energía correspondientes a los primeros meses de este año, concluiremos que el vaticinio de sosa carece de fundamentos numéricos firmes.

Entre los especialistas independientes leíamos este fin de semana una observación del especialista Ing. Axel Cid Benítez, que desde hace unos días la reitera en las redes.

“Sigo diciendo que el 18,4% no fue un crecimiento real del consumo. Por eso no somos tapa mundial (en publicaciones periodísticas) ni nos visitan los extraterrestres, sino un simple blanqueo, de gente que estaba en negro y fue blanqueada. Por eso aumentó más la recaudación que el consumo.

Añadía que “las pérdidas totales oficiales apenas bajaron 2%, que la morosidad sigue y los costos medios de las binacionales son una realidad, pero será absorbida con la alta rentabilidad” (ironía, habitual en su estilo).

Se mantendrá en torno al 6%

En otras fuentes, también independientes, además de vaticinar que la tasa de la demanda se mantendrá este año en torno al 6%, añaden que será menor a la de los dos últimos años.

Dudan de que la elevada tasa del 18% de todo el ejercicio precedente se mantenga y recurren a otra comparación, la tasa de los primeros cinco meses de 2024, que trepó al 28% respecto al indicador del mismo lapso del 2023, con la de este año (enero/mayo) 5.6%, la conclusión, una vez más, cae por peso.

De los informes del Viceministerio de Minas y Energía del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, relativos al comportamiento de los principales indicadores del mercado eléctrico paraguayo, se infiere que en los primeros cuatro meses del año, hasta abril, la demanda aumentó 2,18%.

Inauguran subestación en Valenzuela.
La subestación de Valenzuela es la última de las grandes instalaciones de infraestructura que inauguró la ANDE.

En la publicación de mayo último de ABC señalábamos que en el primer trimestre de 2025 la demanda eléctrica aumentó 5,5% respecto a los indicadores del mismo período del 2024, que alcanzó 24,4% con relación al 20,23, luego la conclusión cae por su propio peso, el acelerado ritmo de crecimiento de la demanda de energía eléctrica, al menos en estos primeros meses del año, mostró una evidente desaceleración del ritmo de crecimiento de la demanda eléctrica.

 

 

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