Tras la incertidumbre y volatilidad que se generó con la guerra comercial entre China y Estados Unidos, marcada por la imposición de aranceles, el reciente acuerdo alcanzado entre ambas potencias vuelve a generar expectativas, especialmente en el mercado de la soja, cuyo precios muestran una tendencia a la baja.
Así lo indicó la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), que destacó cómo el “acuerdo” comercial entre China y EE.UU. refuerza la posibilidad de una mayor demanda internacional de materias primas agrícolas, especialmente desde el gigante asiático.
“El comportamiento de la demanda externa, especialmente de China, sigue siendo un factor decisivo para la evolución de los precios. Como principal importador mundial de soja, el gigante asiático tiene un rol central en el mercado”, explicó.
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Recordó además que, según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), las importaciones de soja del gigante asiático se mantendrían en 112 millones de toneladas para la campaña 2025/26. “No obstante, si no se dan avances concretos en las negociaciones bilaterales durante el resto del mes, la incertidumbre sobre el ritmo de compras por parte de China podría traducirse en nuevas presiones bajistas en las próximas proyecciones del USDA”, explicó.
Complejo escenario
Según Capeco, más allá de las señales políticas, el mercado atraviesa actualmente un entorno complejo, en los factores productivos y en el nivel de la oferta global, que se suman a la continua revisión al alza de las existencias globales de soja.
Agrega que en Estados Unidos, las zonas productoras registran niveles de humedad y temperatura considerados favorables para el desarrollo de los cultivos, que refuerza las expectativas de una campaña con altos rendimientos y añade presión bajista sobre los precios. Según el último informa de USDA, la siembra de la oleaginosa ya supera el 90,0% del área prevista en el país norteamericano, con la mayoría de los cultivos en estado bueno a excelente.
Otro de los principales productores es Brasil, cuyas estimaciones de producción para la campaña 2024/25 también fueron revisadas al alza. Según el informe de la Compañía Nacional de Abastecimiento en el vecino país, su cosecha se ubicaría en 169,6 millones de toneladas, frente a las 168,3 millones previstas anteriormente, por impulso de condiciones climáticas favorables en regiones clave como Mato Grosso.
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“Esta situación reduce el margen para una recuperación sostenida de los precios, ya que la abundante oferta sudamericana también refuerza el escenario sobre abastecimiento global”, precisó y puntualizó así los desafíos comerciales que enfrenta la producción nacional de soja.
En general, las proyecciones de diversos gremios y consultoras internacionales, la producción total de soja en Paraguay estaría superaría las 9 millones de toneladas, con una caída en torno al 15% frente a la campaña 2023/2024. No obstante, aún se espera que finalice la cosecha de la zafriña o ciclo secundario para consolidar los resultados.