Es de mencionar que, la extensión de estos beneficios no es homogénea en la región. Mientras algunos países presentan cifras relativamente moderadas, otros muestran un alto nivel de renuncias impositivas, lo que plantea interrogantes sobre su eficacia y equidad. Actualmente, 18 países de la región, entre ellos Paraguay, Argentina, Brasil, México y Colombia, publican informes oficiales sobre el gasto tributario. A pesar de los avances metodológicos y de cobertura, las diferencias en los marcos conceptuales y métricas utilizadas dificultan las comparaciones directas entre países.
Los datos disponibles permiten identificar ciertas tendencias comunes. En la mayoría de los países, aproximadamente la mitad del gasto tributario se concentra en impuestos generales al consumo, particularmente el IVA. A su vez, una parte importante de estas renuncias se vincula con beneficios relacionados al impuesto sobre la renta, lo que también afecta la progresividad del sistema tributario.
¿Cuál es la situación en Paraguay?
Al observar las estadísticas de los países con menores niveles de ingresos no percibidos por concepto de gastos tributarios en América Latina y el Caribe, Paraguay se encuentra en este grupo. Así, el país habría dejado de recaudar, en promedio, el equivalente al 1,4% del PIB entre 2020 y 2024 debido a exoneraciones fiscales y beneficios tributarios, una proporción muy por debajo del promedio regional, conforme con la Cepal.

Tal como se muestra en el gráfico, mientras que países como Brasil y República Dominicana presentan ingresos no percibidos cercanos al 5% del PIB en el periodo más reciente, Paraguay mantiene una carga relativamente baja y estable. En el caso nacional, los ingresos fiscales no percibidos disminuyeron desde el 1,8% del PIB en el periodo 2010-2014 hasta el 1,4% actual, lo que evidencia un uso más limitado de beneficios fiscales en comparación con otros países de la región.
Esta característica puede interpretarse, principalmente, de dos formas. Por un lado, refleja una política fiscal más conservadora en materia de incentivos tributarios, lo que permite una mayor captación de recursos por parte del Estado. Por otro, también puede evidenciar una estructura impositiva menos compleja o una menor utilización de mecanismos para promover sectores específicos de la economía mediante exoneraciones.

Conforme con datos oficiales de Paraguay, entre 2021 y 2024 el Gasto Tributario acumulado en el país había ascendido a G. 16,3 billones (más de US$ 2.000 millones). Esta cifra significó un incremento del 8% en el período analizado, al pasar de G. 3,9 billones en 2021 a G. 4,2 billones en 2024. El desglose por impuestos reveló que más del 60% de los beneficios fiscales se concentró en el Impuesto al Valor Agregado (IVA), mientras que los Derechos Aduaneros absorbieron cerca del 20%, seguidos por el Impuesto a la Renta Empresarial, con una participación superior al 15%. En cambio, el impacto del Gasto Tributario sobre el Impuesto a la Renta Personal fue considerablemente menor.
Lea más: Conocé la evolución de los ingresos tributarios frente al pago de salarios públicos
Para el año 2025 el proyecto de Presupuesto General de la Nación incluyó una estimación de G. 5,08 billones en concepto de GT, de acuerdo con lo establecido en el Artículo 248, cifra que ronda los US$ 700 millones. Con esta proyección, el monto total destinado a incentivos y beneficios fiscales en los últimos cinco años se aproximaría a los US$ 3.000 millones.
A pesar del bajo nivel de gastos tributarios y en un contexto regional, donde la necesidad de fortalecer las finanzas públicas y mejorar la equidad del sistema tributario gana protagonismo, el país podría beneficiarse de una revisión periódica de estos incentivos, con foco en su efectividad para promover inversión, empleo y crecimiento económico.
* Este material fue elaborado por MF Economía e Inversiones