En la noche del lunes 12 de este mes, luego de que “autoridades de la ANDE y de la EBY de Paraguay se reuniesen con autoridades de la Secretaría de Coordinación de Energía y la EBY lado Argentina ”por largas horas para analizar punto por punto el Acuerdo Operativo con la Entidad Binacional Yacyretá“, los medios paraguayos, mediante un escueto comunicado, se informaron de que el ambiente entre las partes seguía “positivo” y que había expectativa de que el nuevo documento se firme “en la brevedad posible”.
El “comunicado” de la EBY -lado paraguayo-, apuntaba un hecho que tal vez pasó inadvertido para muchos: “Las conversaciones continúan y se están afinando aspectos claves para garantizar que los intereses del Paraguay sean plenamente resguardados” (¡!).
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Tres días antes, el viernes 9 de este mes, el mandatario Santiago Peña sostenía ante los periodistas que el Acuerdo sobre Yacyretá es: “Espectacular. Realmente una gran conquista. Esto lo hemos trabajado prácticamente 20 meses con nuestros pares argentinos”.
El primer mandatario, regresaba ese fin de semana de otro viaje por el extranjero y, según los colegas acreditados para cubrir la actividad presidencial, hizo esas declaraciones sobre Yacyretá luego de recorrer una, escuela de Caacupé, a 55 Km de Asunción.
Contentos y entusiasmados con el “logro”
Peña detallaba que el “paso concreto” dará “sostenibilidad financiera” a la Entidad Binacional Yacyretá. “Estamos muy entusiasmados, muy contentos de haber alcanzado este nuevo logro”, manifestó.
El “lado paraguayo” de la entidad binacional informaba el martes 6, tres días antes de las declaraciones de Peña, que el gobierno argentino, mediante el decreto N.º 303/2025, que firmó el presidente Javier Milei, autorizo formalmente a la Secretaría de Coordinación de Energía y Minería del Ministerio de Economía del vecino país a firmar el Acuerdo Operativo de Yacyretá, en conjunto con la ANDE y la EBY.
Apuntaba que, mediante el documento, prevén la planificación coordinada del retiro de energía desde ambas márgenes (del río Paraná) “respetando el principio de participación igualitaria estipulado en el Tratado de Yacyretá de 1973”.
Agregaba que igualmente se contempla “la estabilidad de un valor de cobro efectivo de US$ 28/MWh (1 MWh = 1000 kWh) para la energía suministrada, sujeta a revisión y mutuo consentimiento, lo cual permitirá ordenar el flujo financiero de la entidad binacional”.
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“Un logro histórico”, según la EBY
El “Acuerdo operativo” Peña/Milei, - si lo aplican - fue presentado en la última semana como “un logro histórico” por la parte paraguaya de la binacional.
Tan convencidos estaban del contenido del anuncio que publicaron un material publicitario, con los ornamentos propios del acuerdo y del contexto. En el que debajo de la banderas paraguaya y argentina se lee LOGRO HISTÓRICO.
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Debajo, con fuente y cuerpo diferente (de letras) otro mensaje, en recuadro: Por primera vez, Yacyetá recibirá 28 USD por MWh de energía que produce.
Luego, con cuerpo más pequeño, en dos columnas, lo siguiente: Izquierda: Más ingresos para el país. Viabilidad Financiera. Derecha: Culminación del Aña Cuá. Creación de fuentes de trabajo”.
Debajo de las dos columnas, sobre una foto del tramo más importante de la represa hidroeléctrica, puede leerse: Gestión Peña-Milei.
Abundaron las copias del decreto del acta
Recordemos que, tanto el decreto 302/2024, como su anexo, el “Acta Acuerdo” entre la EBY, la ANDE y de la Secretaría de Coordinación de Energía y Minería del Ministerio de Economía de Argentina, fue distribuido profusamente, sin los obstáculos que habitualmente erige la actual administración paraguaya de la binacional en el camino hacia esta fuente pública de información.
Apuntemos también que hubo críticas, y muchas, por ejemplo, que aplaza la revisión del Anexo C hasta el 2029. Que rescata la Nota Reversal de 1992, rechazada por el Legislativo nacional.
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Que sumerge la deuda, histórica y presente, al menos por cinco años, en una incertidumbre casi total.