Cargando...
Petróleos Paraguayos (Petropar), administrada por Eddie Jara, informó hoy que el gasoil de la firma uruguaya Ormalor S.A.S., representada por Andrés Mariano Estévez Ruibal, ya lo están cargando en las barcazas que lo traerán hasta la planta de Villa Elisa, desde el Km 171 del Río Paraná Guazú, en la República Argentina (modalidad CIF).
La compañía en cuestión fue adjudicada en enero último para proveer 40.000 metros cúbicos de diésel a la petrolera del Estado, por un total de US$ 26.380.000. El carburante debía llegar en febrero, según el contrato firmado el 22 de enero, pero no cumplió con el plazo establecido.
Desde la Dirección de Comunicaciones de la estatal se informó hoy que el carburante de la empresa está siendo cargado en las barcazas que lo traerán al país. Además, se destacó que aún no se puede dar una fecha estimada de llegada del producto debido a la situación de navegabilidad del Río Paraguay.
Tampoco se sabe el impacto que tendrá esta carga en el precio del gasoil, ya que la cotización de compra es de US$ 659,50 por metro cúbico, que implica US$ 147 más que el gasoil de la firma catarí Doha Holding Group LLC, conocida por su “precio milagroso”.
Lea más: ¿Dónde está el gasoil de la desconocida firma uruguaya contratada por Petropar?

Gasoil de firma catarí sigue sin aparecer
Sin embargo, el combustible de la firma catarí, vinculada al hijo del presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez Pérez, sigue sin aparecer hasta la fecha, a pesar de las prórrogas concedidas a la compañía. Se consultó sobre este asunto en la estatal, pero no hubo respuestas.
Precisamente, la compra “oportunidad” de Petropar a la firma uruguaya Ormalor se realizó en medio de los incumplimientos de la firma catarí Doha Holding Group LLC, cuyo contrato parece que ya está al borde del fracaso, a pesar de que hasta ahora le dieron cuatro prórrogas.
El contrato con la firma catarí venció el 30 de noviembre del año pasado, pero Petropar extendió su plazo: primero hasta el 31 de diciembre, luego hasta el 31 de enero, después hasta el 28 de febrero y ahora hasta el 31 de marzo.
Aun con toda esa flexibilidad, la firma no cumplió. Recordemos que las ampliaciones contravienen la Ley 7021 de Suministro y Contrataciones Públicas, que solo permite un aumento de hasta el 20% en plazos y montos de contratos.
De esta manera, la estatal continúa beneficiando a la empresa catarí para que le abastezca las 100.000 toneladas métricas de gasoil, que le habían adjudicado por un valor superior a los US$ 61 millones, al “milagroso” precio de US$ 610 por tonelada métrica, o US$ 512,40 por metro cúbico, un precio que ni el gigante de Brasil pudo conseguir.
Sospechosa preferencia de Petropar al “procedimiento especial”
Tanto en la contratación de Doha Holding como de Ormalor, Petropar recurrió a la modalidad del procedimiento especial, con publicación posterior de los documentos en el portal de la DNCP, mediante el cual requerían con urgencia el producto. Con este tipo de llamados, la petrolera estatal tuvo escasa transparencia en el uso de los recursos públicos, al evitar la publicación de los documentos de compra antes de que se firme del contrato e incluso ocultarlos durante un largo período después de ese acto administrativo.
La Ley N.º 7.021 permite a la estatal realizar este tipo de procesos para adquirir combustibles (Art. 35, inc. “f”), ya que opera en régimen de competencia con el sector privado y tiene “relación directa con su giro comercial”, según la normativa. Sin embargo, parece que la estatal aprovechó este procedimiento especial solo para contratar empresas de dudosa procedencia y sin experiencia en el rubro de los combustibles.
En este sentido, tanto en la adjudicación a Doha Holding como a Ormalor, Petropar ni siquiera evaluó la capacidad financiera de las empresas en el momento de adjudicar los contratos. Además, ambas son desconocidas en el rubro de los combustibles, por lo que, al parecer, fueron creadas recientemente solo para proveer a la petrolera estatal, la que tampoco les exigió una garantía bancaria, ni una póliza de seguro como caución de mantenimiento de oferta o de fiel cumplimiento del contrato.