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Jorge Martínez, asesor de la Federación de Cooperativas de Producción (Fecoprod) habló sobre los proyectos que llegan como donaciones de organizaciones internacionales a Paraguay. Sostuvo que esas iniciativas son propuestas, pero con condiciones. “Muchas veces estás condiciones se desconocen, no se socializan de tal forma que se pueda dar un acuerdo previo dentro del país”, destacó.
Subrayó que, con los convenios internacionales, se espera que haya transparencia y que sea de público conocimiento las condiciones de los financiamientos. “Algunos de los objetivos son buenos, pero están construidos sobre las bases contrarias”, sostuvo.
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Destacó que los proyectos son construidos sobre una base irreal del panorama país. “Le escuchamos decir al presidente de las Republica decir que Paraguay es un país sostenible y verde, pero en el proyecto señalan que estamos mal. Hay un doble discurso”, explicó.
Agregó que entre algunas problemáticas presentadas está que la producción de alimentos genera problemas. “De alguna manera es lo que Folur promueve como objetivo central. El donante dice lo que hay que hacer”, dijo.
“Los proyectos sostienen que existe una catástrofe ambiental por la producción de carne y soja en el país, evidentemente alguien está mintiendo. ¿Por qué sustentan sus proyectos sobre bases que no están bien fundamentadas?”, señaló.
Instituciones demuestran debilidad ante proyectos internacionales
En ese sentido, analizó que existe una debilidad institucional para conseguir esos recursos. Los proyectos son vendidos con el fin de potenciar la producción. “Te dicen de afuera qué son las buenas prácticas, cómo son es la siembra directa; sin embargo, nosotros somos campeones y sabemos nuestra tierra”, señaló.
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De acuerdo a un documento compartido por Héctor Cristaldo, representante de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), recibe unos USS 95.080.500 para el financiamiento de organizaciones internacionales para al menos 11 proyectos.
En ese sentido, Martínez subrayó que estuvieron conversando con el ministro del Ministerio del Ambiente, quien demostró apertura para el ajuste de proyectos. “Esa buena voluntad queda en palabras, porque no vemos eso en documentos”, señaló.
Manifestó que el Mades puede demostrar los documentos de los proyectos, con sus inversiones y gastos. “Nadie le va a reclamar nada si lo hacen de manera transparente”, señaló. Agregó además que llama la atención cómo el ministro firma los convenios sin que sea tratado en el Congreso.
Aseveró que las políticas que se pretenden implementar generen un mayor perjuicio en términos de producción. “Si no aumentamos nuestra capacidad productiva, nos vamos a quedar estancados. Esto no solo afecta al productor, sino a la economía del país”, subrayó.