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“En mi familia nos encontramos realizando trabajos de apicultura hace 64 años, yo viajé a Alemania a capacitarme y hace 22 años decidí seguir con el rubro familiar. Al comienzo llevábamos las colmenas a las zonas de producción de canola, pero después fuimos cambiando este método y lo mejoramos por medio de la transhumancia (traslado de las colmenas de una zona a otra), yendo a otras regiones como el Chaco Paraguayo; actualmente ya tenemos un camino que seguimos y logramos cosechar miel casi todo el año prácticamente”, señaló Dohmann.
El paso a paso de la trashumancia
Si bien la trashumancia se refiere al traslado de animales, de un ambiente a otro para lograr su confort, en este caso se traduce al manejo de las abejas. “Esto arranca con la canola más o menos a mitad de invierno, ya que es la primera que florece, produce mucho polen, promueve la producción de miel y con esto las colmenas empiezan a reproducirse; este proceso se extiende hasta mediados a fines de agosto, a partir de ahí se puede realizar la trashumancia (traslado) al Chaco, donde hay florecimiento de algarrobo a comienzos de setiembre donde las abejas quedan hasta febrero. Posteriormente, llevamos las colmenas a Colonia Yguazú en cultivos de eucalipto, que en ese momento están floreciendo, y con esta etapa cerramos el círculo”, explicó Dohmann.
Las abejas y los cultivos extensivos
A la consulta de cómo es el manejo de las colmenas, atendiendo que un cultivo extensivo como la canola puede recibir pulverizaciones para control de plagas y enfermedades, nuestro entrevistado dijo: “La producción de abejas y la agricultura extensiva son compatibles, la clave se encuentra en elegir correctamente los productos a ser utilizados, es decir, que el productor utilice aquellos productos que no dañen a las abejas, algo que últimamente ha mejorado, ya que muchos de estos productos son más amigables con el ambiente, pero siempre es importante que el productor y el apicultor conozcan; en el caso de la familia Friedrichsen, ellos utilizan productos orgánicos”.
Qué falta en Paraguay
“Desde mi punto de vista, en el Paraguay los apicultores siguen en etapa de crecimiento, falta seguir capacitándose para crecer en tecnologías, lastimosamente la mayoría de los productores tiene este rubro como actividad complementaria. En los últimos tiempos, la demanda de miel aumentó en gran medida, por ejemplo nuestra producción de miel de canola fue totalmente vendida. Conocemos a muchos apicultores que están haciendo un gran trabajo, pero aún hay mucho por hacer”, explicó Dohmann.
Decepción y satisfacción
Toda actividad puede tener sus decepciones y sus satisfacciones; don Juan nos habló sobre ambas.
“Una de las decepciones más grandes que tenemos como apicultores es cuando nos roban y destruyen nuestros apiarios, ya tuvimos varios casos donde las personas roban la miel y queman las cajas, que son situaciones que entristecen mucho. En contrapartida, la mayor satisfacción es cuando el apicultor obtiene el fruto de su esfuerzo al ver la colmena con mucha producción de miel, esto es algo que nos inspira mucho y nos da fuerzas”, finalizó.