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A primera vista parecería que la cantidad de energía que cedió nuestro país al Brasil entre 1984 y 2022 es un trazo más o un color en el conocido cuadro itaipuano, sin embargo sería suficiente para cubrir la demanda de 60,3 países como el nuestro. En efecto, en 2022, el mercado paraguayo, de acuerdo con datos oficiales, incluyendo las elevadas pérdidas de la ANDE, consumió 19.737.647 MWh (1 MWh = 1000 KWh).
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Apuntemos también que en todo ese tiempo, el Paraguay, propietario por partes iguales de Itaipú y de su energía, recibió del Brasil en concepto de compensación por cesión de energía US$ 4.934.300.000, un poco más del tercio del monto del Presupuesto General de Gasto (PGN) 2023 del sector público paraguayo.
Si dividimos esta suma por la cantidad de energía que el Paraguay cedió en el lapso de referencia, o sea US$ 4.934.300.000/1.190.659.000 MWh, descubriremos que el valor unitario promedio de la afamada “compensación por cesión de energía” se redujo a tan solo US$ 4,13/MWh, o sea 28,7 guaraníes por KWh, inclusive muy por debajo de las tarifas sociales de la ANDE en nuestro país.
En el contexto de los intercambios de energía eléctrica entre Argentina y Brasil en los primeros meses del ejercicio en curso, la Argentina recibió el MWh del Brasil por US$ 100 aproximadamente.
Solo US$ 11,5/MWh en el primer trimestre de ese año
En el primer trimestre del presente año, el valor unitario promedio de la “compensación” al Paraguay por ceder su energía al Brasil fue de US$ 11,5/MWh, que es el resultado de dividir la suma que Itaipú transfirió al Estado paraguayo en ese lapso por ese concepto, dividida por la cantidad de MWh que le cedió.
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CanalEnergía, el marco de la entrevista con Verri agrega que “... las negociaciones sobre la tarifa y la revisión del Anexo C adquieren contornos no solo económicos y financieros, sino también políticos; que así lo definió el nuevo director general brasileño de Itaipú en la entrevista con este medio del Brasil.
En lo concerniente a la política de la nueva administración en el frente brasileño de Itaipú, el medio especializado, según su entrevistado, la entidad “retomará proyectos y políticas sociales en lugar de invertir en infraestructura”, como lo hizo el gobierno de Jair Bolsonaro.
Enio Verri reiteró en la entrevista de referencia que “los convenios cerrados después del 30 de octubre (2022) están suspendidos”, lamentablemente, el material que subieron a su página digital no incluye la lista de los “convenios” se encuentran en estado de suspensión.
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Revisan decisiones de la anterior administración de la binacional
La suspensión, explican, les permitirá revisar los montos de los mismos, así como la capacidad de pago (de itaipú) porque la entidad binacional “tiene montos comprometidos muy altos y quedó poco para las inversiones hasta el 2025″.
De ahora en más, se infiere, en Brasil pasan a un rol más social en lugar de invertir en la construcción de obras “catalogadas como caras por el nuevo ejecutivo”, concluye.