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A la edad de 48 años, ella logró romper el récord de Bernard Hopkins, quien ganó su último título mundial algunos días más joven.
Alicia Ashley derrotó a la dura irlandesa Christina McMahon por decisión unánime, convirtiéndose en la nuevo monarca supergallo del WBC, en un combate que se llevó a cabo en Brooklyn, Nueva York. El Cinturón supergallo WBC quedó vacante debido a que la campeona Jackie Nava está embarazada.
Por tanto, “La Princesa Azteca” ha sido nombrada “Campeóna Emérito” y podrá pelear en contra de Ashley el día que ella decida volver al ring. El Consejo Mundial de Boxeo felicita a Alicia Ashley para este logro increíble e histórico.