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Después de 12 años con el equipo Mercedes, Hamilton competirá éste fin de semana por primera vez con el Ferrari rojo en el Gran Premio de Australia, a sabiendas de que las expectativas son altas.
El siete veces campeón del mundo de la máxima categoría del automovilismo a nivel mundial, la Fórmula 1, comenzó en enero sus trabajos con la escudería del Cavallino Rampante después de su sorprendente cambio, y completó 162 vueltas de pruebas en el Circuito de Baréin.
El piloto de 40 años expresó que es difícil evaluar el lugar que ocupará Ferrari en el inicio de la presente temporada.
“Obviamente con tres días en el monoplaza es difícil saber cuál será nuestra posición respecto a los demás, pero intentaremos mantener la cabeza baja y centrarnos en nuestro trabajo”, declaró en Melbourne.
“Pero por mí, quiero decir que estoy ansioso por comenzar”, añadió el nacido en Stevenage, Reino Unido.
Ferrari se vio superada por McLaren en el campeonato del año pasado, y fue la séptima vez que el equipo italiano finalizó segundo, desde la última vez que ganó el título, en 2008.
Kimi Raikkonen fue el último piloto en alcanzar un título con Ferrari y Hamilton atemperó las expectativas de lo que él podrá alcanzar: “Aún estoy conociendo este monoplaza nuevo, que es bastante diferente a lo que he conducido previamente en mi carrera. Es algo bastante nuevo, una vibración diferente, una sensación diferente, una forma diferente de trabajar”, concluyó.
