Vuelve a prisión

RÍO DE JANEIRO. El arquero brasileño Bruno Fernandes deberá volver a prisión por el asesinato de una examante, luego de que la Corte Suprema pusiera fin a un breve periodo de libertad en que el exjugador del Flamengo fue contratado por otro club.

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Bruno, de 32 años, fue condenado a purgar 22 años y tres meses de cárcel por el homicidio de Eliza Samudio, una modelo con quien había tenido un hijo, pero en febrero pasado consiguió su excarcelación gracias a un habeas corpus.

El “Supremo Tribunal Federal (STF) juzgó inviable el habeas corpus presentado por la defensa del arquero Bruno Fernandes de Souza y revocó la medida cautelar que había suspendido su prisión preventiva”, informó el tribunal en un comunicado.

La decisión adoptada por uno de los dos cuerpos colegiados del STF “determina el restablecimiento de la custodia cautelar” y debe tener un cumplimiento “inmediato”, dijo a la AFP una fuente de la corte.

El arquero había ingresado preventivamente a prisión en 2010, cuando era seguido por el AC Milan de Italia, por estar involucrado en el homicidio de Samudio, de 25 años.

El cadáver de la joven nunca apareció y Bruno confesó ante el juez que su cuerpo desmembrado fue arrojado a los perros por los autores materiales del crimen para que no fuera reconocida.

El exjugador del popular equipo carioca fue condenado en 2013 por haber impartido la orden, pese a nunca haber admitido su responsabilidad en el macabro asesinato.

La revisión del caso se hizo a pedido del fiscal general, Rodrigo Janot, poco después de que Bruno recuperara su libertad y fichara por dos años para el equipo de segunda división Boa Esporte, de Minas Gerais (sudeste), desatando una gran polémica.

El modesto club lo presentó a mediados de marzo. Su controvertida decisión le costó perder la mayoría de sus anunciantes.

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