Esa cartulina roja que vio el delantero valencianista cambió radicalmente un choque nivelado hasta entonces, y ya resultó una ventaja sideral para Las Palmas, que había construido su remontada con un golazo de Jonathan Viera antes del descanso, mejorado después con otro sensacional disparo de Mauricio Lemos, de falta directa.
Valencia, mientras estuvo vivo, creó problemas. Quique Setién, entrenador local, había avisado del peligro de sus laterales, y el zurdo Gayá se encargó pronto de darle la razón. Un primer centro suyo acabó con un cabezazo fuera de Munir.
Hasta este momento no había pasado mucho más en un partido muy táctico, con ambos equipos muy pendientes de no dejar espacios al rival, cuando Enzo Pérez encontró a Gayà por la izquierda, a la espalda de Míchel Macedo, y esta vez su preciso centro raso, justo entre el portero y los centrales, donde más daño hace, lo impulsó a la red el gallego Santi Mina.
Ese gol dio paso a unos minutos de control visitante, con Dani Parejo poniendo poso en el juego del equipo valenciano, pero Las Palmas agitó el partido y creó ocasiones para Boateng y Vicente Gómez.
El empate llegó, sin embargo, en una suerte poco habitual para los isleños, muy acostumbrados a tejer sus jugadas casi hasta la línea de meta, porque fue con un gran un disparo desde fuera del área de Jonathan Viera que se coló cerca de la escuadra, imposible para Diego Alves. El jugador isleño, castigado la semana anterior por Setién, apenas lo celebró, no se sabe si por habérselo hecho a su exequipo, o por la reciente polémica con su entrenador.
Valencia perdió por lesión a Enzo Pérez al término de la primera parte, y nada más iniciarse la segunda a Munir por una torpeza supina, al ver dos tarjetas amarillas en solo tres minutos. Poco tardó Las Palmas en aprovechar el regalo, aunque el segundo gol no llegó por un desequilibrio numérico, sino de falta directa, en un formidable disparo del uruguayo Mauricio Lemos a la escuadra.
Las desgracias no acabaron ahí para el Valencia, porque Mangalá cometió un error grosero al medir muy mal un centro que no despejó, y el balón llegó a Prince Boateng, quien batió por bajo a Alves.
Con la cómoda renta y el partido dominado, Las Palmas se permitió el estreno del internacional croata Alen Halilovic, con sólo dos entrenamientos con sus nuevos compañeros, y un escenario perfecto para su juego, con un futbolista más que el rival.
Valencia tiró de orgullo, incluso hizo a trabajar a Javi Varas con remates de Santi Mina y Mangalá, y evitó recibir una goleada mayor ante un rival desatado, que con esta nueva victoria refuerza su condición de invicto en casa en el inicio de la segunda vuelta.