A sus 35 años, el extremo holandés dejará el equipo alemán en junio tras haber pasado diez años en Baviera, y espera tomar una decisión en las “dos próximas semanas” sobre la continuación de su carrera.
Lesionado desde noviembre, Robben regresó a los terrenos hace dos semanas. “No es evidente tomar una decisión. La más fácil sería decir que me retiro, pero si quieres continuar jugando, debes encontrar el lugar correspondiente, no solo desde el punto de vista futbolístico sino también familiar”, explicó.
A la pregunta de un periodista sobre si retirarse era una posibilidad, respondió afirmativamente: “Es una opción, pero no sé si va a pasar”.
Vencedor de la Liga de Campeones en 2013, su “más bello recuerdo”, el holandés espera lograr un octavo título de Bundesliga este fin de semana con la vista del Eintracht de Fráncfort.
“Ser campeón el sábado, tras haber pasado diez años en este club, en medio de 70.000 aficionados, en un Allianz Arena repleto, no hay nada mejor”, según el holandés.