Esta operación ha sacudido a la afición del conjunto periquito, ya que el meta de Sallent (Barcelona), de 24 años, se ha formado en la cantera españolista y era la principal figura del plantel, clave con sus paradas para lograr el ascenso de la pasada temporada y la salvación de la presente campaña en LaLiga EA Sports.
Según datos de BeSoccer Pro para EFE, antes de Joan García fueron 83 los jugadores que disputaron al menos un encuentro en competiciones nacionales o internacionales con el Barça y el Espanyol. Eso sin contar partidos de ámbito regional, mayoritarios a principios del siglo veinte, ni los habituales trasvases en las categorías inferiores.
De 2000 en adelante, veinte futbolistas llegaron al Espanyol procedentes de un tercer equipo tras haber jugado antes en el Barcelona, dos jugadores siguieron el camino contrario, otros tres saltaron directamente del club azulgrana al blanquiazul y uno lo hizo al revés.
El Espanyol, destino habitual de canteranos del Barça
Joan García rompe con el patrón establecido este siglo, pues lo habitual era que los canteranos de La Masía, tras no asentarse en el primer equipo, terminaran en el rival ciudadano en busca de minutos. Así sucedió con algunos integrantes de la 'Quinta del Mini': Roger y Òscar García, Toni Velamazán y, sobre todo, Iván de la Peña, que se convirtió en capitán e ídolo periquito.
También llevaron el brazalete en el Espanyol otros ex del Barça como Sergio García y Víctor Sánchez. Y más recientemente, el danés Martin Braithwaite desempeñó un papel protagonista en el ascenso a LaLiga EA Sports en el curso 2023-2024, por destacar algunos ejemplos exitosos desde la óptica blanquiazul.
Sergi Gómez, Denis Suárez, Aleix Vidal, Oier Olarzábal, Paco Montañés, Abraham González, Simao Sabrosa, Joan Verdú, Joaquín Pérez 'Rufete', Jordi Gómez, Jofre Mateu, Dani García, Jordi Cruyff, Xavi Roca, Fernando Muñoz 'Nando' y Cristóbal Parralo completan la lista de futbolistas que han jugado en el siglo XXI en el Espanyol tras hacerlo en el Barcelona.
En el sentido contrario existen los precedentes de Samuel Eto'o y Philippe Coutinho, cedidos al Espanyol como jóvenes promesas muchos años antes de recalar en el Barcelona como figuras ya contrastadas, y el caso particular de Jonathan Soriano, que terminaba contrato tras encadenar varias cesiones, fichó por el filial culé para relanzar su carrera y llegó a debutar con el primer equipo.
Urruti, un precedente de grato recuerdo en el Camp Nou
Durante los noventa, el Barcelona fichó a Ígor Korneiev -tras haber sido dado de baja por el club blanquiazul- y al experiquito Xavier Escaich -procedente del Sporting de Gijón-, que no dejaron una gran impronta en el Camp Nou.
Y en la década anterior, el club azulgrana reclutó del Espanyol a Urbano Ortega, Miquel Soler y Ernesto Valverde. Éstos dos últimos, procedentes del equipo que alcanzó la final de la UEFA en 1988 para reforzar a un Barça en reconstrucción tras el conocido como 'Motín del Hesperia'.
Asimismo, en los ochenta se fraguó el que probablemente sea el traspaso más exitoso del Barcelona desde el Espanyol, el del carismático portero Francisco Javier Urruticoechea 'Urruti', célebre por el penalti que paró al Valladolid y certificó el título de LaLiga 1984-1985.
Un caso difícil de comparar con el de Joan García en el aspecto emocional para la parroquia blanquiazul, pues el arquero vasco se formó en la Real Sociedad y solo disputó tres cursos en Sarrià.
Si hubiera que remontarse al último canterano idolatrado en el Espanyol que pasó al Barça, ese sería José Cano 'Canito', absuelto en la memoria españolista porque regresó a casa tras un paso breve y accidentado por el rival ciudadano. Y es que, en 1980, llegó a celebrar sobre el césped del Camp Nou un gol que daba la salvación a los periquitos al verlo anunciado por el marcador.
Zamora, billete de ida y vuelta del Espanyol al Barça
De entre los demás futbolistas que pasaron del Espanyol al Barça destacan Marcial Pina, figura importante en el equipo azulgrana de los años setenta, y el legendario portero Ricardo Zamora, que tras un breve paso por el Barcelona en los años veinte volvió a vestir de blanquiazul y terminó en el Real Madrid.
En la dirección opuesta, el caso más recordado por los aficionados más veteranos es el de Ladislao Kubala, jugador que cambió la historia del Barcelona en los años cincuenta. Una vez retirado, dio el salto a los banquillos y dirigió al Barça pero, después de ser destituido, descolgó las botas y defendió la zamarra del Espanyol, un movimiento que generó mucho revuelo en la época.
Sesenta años después, en la capital catalana vuelve a hablarse de un futbolista que cambia de bando, Joan García, protagonista de un nuevo episodio en la eterna rivalidad entre el Espanyol y el Barcelona.