En el ganado fue titular el paraguayo Miguel Almirón. Una acción extraordinaria del delantero sueco, inalcanzable para cada uno de los adversarios que se cruzaron en su camino, pero que retrató el momento del conjunto de Liverpool, al borde del abismo, incapaz de arrebatarle la pelota, pero también sin la tensión que exige un encuentro de esta dimensión, más aún cuando era la siguiente jugada a su único gol: el 3-1. 49 segundos después, recibió el 1-4. El 1-5 fue anulado por el VAR.
Ya estaba sentenciado entonces el duelo en Liverpool, con el 0-3 con el que mandaba el Newcastle.
El 0-1 lo anotó a la media hora, con Joelinton como propulsor y con Callum Wilson como rematador; el 0-2 llegó en el 73, por medio de Joelinton, que remató de cabeza; y el 0-3 fue de nuevo de Callum Wilson, con un golazo con la derecha. A la escuadra. El 1-4 lo fabricó solo Isak y lo culminó Murphy.
El Newcastle tiene aún ocho puntos de ventaja en la carrera por la Liga de Campeones. Prácticamente la tiene hecha.
El Everton, que sólo ha ganado uno de sus últimos diez choques y encadena seis jornadas sin vencer, sigue en posiciones de descenso. Está a dos puntos de la permanencia.