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La historia continúa y hoy se suma otro protagonista. Ayer, Fabio Escobar rompió el silencio y pegó contra Rubén Ruiz Díaz por supuestas amenazas contra él y Cristian Bogado. En conversación con el Cardinal Deportivo fue Bogado quien contó su versión y expresó que "yo recibí amenazas un poco más fuertes que Fabio (Escobar). Me puso que mis hijos se van a arrepentir porque yo vendí un partido. Ahí c... conmigo porque no voy a aceptar a que se metan con mis hijos. Ellos nos ensuciaron gratuitamente y luego se limpiaron con echarnos. Él dice por sus jugadores que son borrachos, pero él no se mira al espejo".
Como respuesta, el presidente de Rubio Ñu no se refirió al tema y mencionó que no tiene por qué hablar de jugadores que ya no están en la institución. "Una persona normal no te va a escribir a las cinco de la mañana. A mí me pone 'sos un borracho, un bandido' y él no se mira al espejo. Yo creo que sí estaba borracho", continuó el delantero a la 730 AM.
"Dice que vendimos el partido contra General Caballero. Yo le había reenviado a Robert (Harrison) y me dijo que me quede callado, pero yo no voy a aguantar. Quiero que me traigan pruebas de que vendí un partido y, si es así, me retiro del fútbol. Tengo mis hijos y venderme por 5 millones me va a ensuciar para toda la vida", señaló Bogado.
Según el futbolista, el club está atrasado con ellos. El acuerdo económico de Rubio Ñu con Gamarra, Bogado y Escobar fue que seguirían cobrando hasta fin de año. "Estamos reclamando nuestros derechos. Me debe como G. 40 millones. Hasta mañana vamos a esperar; si no nos pagan, le vamos a demandar. Que se ponga los pantalones y nos llame a decirnos que nos va a pagar. Hablando uno se entiende pero escondiéndose no", finalizó. Ruiz Díaz había aclarado que el sueldo de diciembre lo recibirán antes de Navidad como el resto de sus excompañeros.