El arbitraje no estuvo a la altura
El partido comenzó “a todo trapo”, con una intensidad que caracteriza a Guaraní, superado inicialmente en energía por Ameliano. Si bien el fútbol es un deporte de contacto, algunos jugadores parecían autos chocadores.
La V azulada tuvo un pasaje altamente favorable que no la pudo aprovechar. Pase al vacío de Elvio Vera a Salah Samudio que al superar la línea del arquero definió y su tiro fue al palo.
Después, un cabezazo de Marcos Martinich que pasó cerca. El argentino se pasó de revoluciones y causó un gran perjuicio a su equipo.
El panorama cambió con la expulsión por doble amarilla del lateral izquierdo argentino, quien primero fue amonestado por cortar una salida de Manzur y luego por retrasar la reposición, enviando el esférico despositado en el cono a otro lugar. Se regaló el defensor. Aplicación de la regla de juego por parte de Juan Gabriel Benítez, del que se esperaba una conducción más solida, de cara al superclásico.
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Con la ventaja numérica, el Cacique activó el modo ofensivo. Pase profundo de Alcides Benítez a Sánchez que remató al caño y de rebote, Fernando Fernández desaprovechó una acción frente al arco, toda una rareza para el eximio definidor.
Además de quemar segundos, el golero Miguel Martínez tuvo una gran tapada tras un tiro de Diego Fernández, cerca del cierre del primer tiempo.
Para el segundo tiempo, Víctor Bernay ordenó la inclusión de Alexandro Maidana. En su primera intervención, en mundialista Sub 20 recibió un pase de Rodríguez en su andarivel y el centro se convirtió en gol con el desvío en el Mudo Valdez.
Fer-Fer se perdió otra clara oportunidad de anotación, en una fase dominada por el Legendario que al quedar 11 contra 10, marcó cierta diferencia.
El Fernández efectivo fue Diego, quien tras un pequeño recorte despidió un zurdazo para registrar el tanto que no subió al marcador por una supuesta falta de Maidana en un forcejeo contra Aranda, que hasta le costó la tarjeta roja al aurinegro (ya tenía amarilla), en una determinación por demás drástica.
Ameliano empujó, aunque en ningún momento fue claro, pero en la última maniobra, Aldo Maíz cometió una falta a Lezcano en el área no advertida por el juez. Llamado de la cabina, revisión y penal convertido por Sanguina para el dramático empate en La Fortaleza.
