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Juego impreciso y sin contundencia
El partido tuvo un comienzo prácticamente sin oportunidades de gol frente a los arcos. Inicialmente el equipo auriazul fue el que más se animó y con la intervención del mediocampista Kevin Pereira arrimó peligro, pero la jugada terminó con una tapada del arquero gumarelo Rodrigo Morínigo, que desvió el balón al tiro de esquina.
Posteriormente, Luqueño se fue quedando en el trámite del encuentro y fue Libertad quien tomó las riendas del mismo. Intentó, a través de Iván Franco y Rubén Lezcano, en el medio sector, e Iván Ramírez, empujando desde atrás, generar más fútbol asociado, con el que después de los quince minutos recién llegó la primera acción concreta frente al pórtico defendido por Alfredo Aguilar, en los pies del delantero Marcelo Fernández.
A partir de ese momento ambos entraron en un mar de imprecisiones, por lo que las vallas se mantuvieron invictas. En la parte final del primer tiempo, Marcelo Ferreira ganó las espaldas de la defensa liberteña, pero picó larga la pelota y no pudo finalizar la jugada, ante un Morínigo que se hizo del esférico.
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Antes de ir a los vestuarios Fernández tuvo dos tiros más para desnivelar el marcador, pero nuevamente Aguilar evitó que haya festejo repollero.
En el entretiempo las autoridades inauguraron la nueva lumínica del recinto carapegüeño, y con luz artificial se abrió la segunda mitad del cotejo.
El conjunto de Luque arrancó mejor los segundos 45′; con cambios, y Jorge Benítez tuvo opciones, pero sin que llegue la máxima emoción del fútbol: el gol.
El Guma hizo lo propio y con Bautista Merlini, que remató al travesaño, y Franco, que cabeceó a quemarropa y desvió Aguilar, culminó el duelo de dos contendientes a los cuales les faltó contundencia.