El futbolista de 29 años, que salió el pasado fin de semana del hospital donde fue operado, pasó por el campo de entrenamiento del Wolves para ver a sus compañeros por primera vez después de la lesión que sufrió ante el Arsenal.
Acompañado por el doctor del equipo, Jiménez se abrazó y conversó un rato con el resto de futbolista, antes de marcharse a casa donde, junto a su pareja y su hija, continúa con la rehabilitación.
Jiménez será homenajeado este sábado en el partido contra el Aston Villa, después de que un micromecenazgo llevado a cabo por los aficionados de todo el mundo haya logrado financiar una pancarta que lucirá en una de las tribunas principales del Molineux Stadium y en la que se apoyará al jugador.