Una avería propicia la victoria de Bird

Una avería mecánica acabó con las esperanzas de victoria del sueco Felix Rosenqvist, que había partido desde la pole, y propició la victoria del británico Sam Bird en la séptima carrera de Fórmula E, disputada en Roma.

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A diez vueltas del final, Rosenqvist (Virgin Racing), que había rodado en cabeza desde la salida, se quedó fuera de carrera por un problema en la suspensión tras un leve toque con el muro. Birg cruzó el primero la meta, seguido del brasileño Lucas di Grassi (Audi), y el alemán Andre Lotterer (Rebellion Racing) completó el podio, mientras su compañero de equipo y líder del campeonato, el francés Jean-Eric Vergne, terminó quinto.

El portugués Antonio Félix da Costa y el argentino José María López, protagonistas de un incidente en la sesión de clasificación que les impidió participar en ella, fueron adelantando posiciones durante la carrera hacia la zona de puntos. Da Costa fue penalizado con 10 puestos en la parrilla de salida como responsable de la colisión con “Pechito” López en la calle de garajes durante la sesión de clasificación y además multado con 10.000 euros por dar salida al coche de manera peligrosa.

A diez vueltas del final, Rosenqvist tocó el muro y rompió la suspensión, lo que le obligó a abandonar. Bird quedaba en cabeza, seguido de Evans y Di Grassi, pero este le arrebató al británico el segundo puesto en los últimos metros. Vergne sigue al frente del campeonato, que continuará dentro de 15 días en París.

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