Una larga cola de vehículos estacionados sobre la banquina. Los propietarios de estos autos utilizan la vía pública para comer, tomar alcohol y hasta bailar.
A metros de la Conmebol; la Policía mirando sin hacer nada. Es un peligro para los que pasamos por ahí para ir a nuestras casas los fines de semana.
Ricardo Dejesús