Rooms, como se ha bautizado la nueva aplicación, es una versión adaptada para el móvil de los clásicos chats de internet y funciona de manera totalmente independiente a la aplicación de Facebook, de manera que no es necesario que el usuario vincule ambas cuentas.
“Crea una 'habitación' (en inglés, ”room“) para aquello que te guste. Personalízala. Elige un pseudónimo distinto para cada 'habitación'. Habla con los demás sobre aquello que te gusta”, indica una sencilla lista de instrucciones en el portal web que Facebook ha creado para promocionar su nuevo producto.
En los diferentes chats o 'habitaciones', los usuarios pueden conversar sobre el tema que les ocupa, así como compartir fotografías y vídeos.
Algunos de los temas para chats que Facebook propone en su promoción son “cazadores de ramen” (la tradicional sopa de fideos japonesa), “creadores” o “kendama” (un juego tradicional también japonés muy popular entre los jóvenes empleados de las empresas de Silicon Valley).
“Ahora te puedes conectar con gente de cualquier parte del mundo a quienes les guste algo tanto como te gusta a ti”, indicó en un comunicado el jefe de equipo del producto de Facebook, Josh Miller, para quien esto todavía no era posible en las aplicaciones para móviles.
La política de identidad de Facebook desde sus inicios siempre ha sido tratar de que todos sus usuarios se identifiquen en la red por sus nombres reales y hacer así de la red social un lugar más transparente en el que nadie pueda refugiarse en el anonimato, una filosofía con la que rompe la posibilidad del anonimato en Rooms.
El pasado 1 de octubre, Facebook se disculpó públicamente ante la comunidad lesbiana, gay, bisexual y transexual (LGBT) por la política de identidad que aplica en la red social y que obliga a los usuarios a identificarse por sus nombres reales, lo que había levantado varias quejas de esta comunidad.
La polémica que llevó a Facebook a disculparse en público se inició a mediados de septiembre, cuando varias drag queens, muchas de ellas del área de San Francisco (California, EE.UU.), denunciaron a los medios que Facebook les había bloqueado las cuentas por no utilizar sus nombres reales en la red social.