Según Zhang, citado por la agencia oficial Xinhua, el ministerio apoyará el desarrollo de este sistema operativo, ya que la decisión de Microsoft “pone en riesgo a las redes de telecomunicaciones básicas de China y amenaza a la seguridad en general”.
Se calcula que alrededor del 70 por ciento de los ordenadores personales chinos (muy por encima de la media mundial, del 27 por ciento), incluso en sectores estratégicos como las telecomunicaciones, usan todavía XP, sistema operativo al que Microsoft dejó de dar asistencia técnica el pasado 8 de abril.
Linux, un sistema construido a partir de software libre, es utilizado sólo por el 1,5 por ciento de los ordenadores de todo el mundo, frente al 91 por ciento de la cuota de mercado de Windows y el 8 por ciento de OS X, diseñado especialmente por los ordenadores de Apple.
En el país asiático, un 90 por ciento del software que se utiliza es pirateado, lo que ha contribuido a que muchos usuarios no hayan actualizado sus ordenadores en los cerca de 13 años en los que XP ha estado plenamente operativo.