“No hemos visto nada. Incluso contactamos con la NASA (la Agencia Espacial de Estados Unidos) y tampoco vio nada. Oímos rumores de que alguien había avistado una bola de fuego en el cielo, pero no fue verificado”, dijo a Efe el científico GDK Mahanama, de la Universidad Ruhunu, situada en el punto más meridional de Sri Lanka.
El objeto, bautizado como WT1190F, tenía previsto colisionar en el Océano Índico a las 11:40 hora local (02:40 hora paraguaya), aunque se esperaba que parte del mismo, de unos dos metros de diámetro, se desintegrara al entrar en contacto con la atmósfera.
Mahanama se encontraba en compañía de miembros de la Agencia Espacial Europea (ESA), que se habían trasladado expresamente a Sri Lanka para estudiar el impacto del objeto. “Instalamos, junto a un par de colegas franceses, dos puntos para observar y grabar la caída del objeto”, explicó el científico ceilanés.
El astrónomo y astrólogo Chandra Wickramasinghe, de la Universidad de Cambridge, aclaró a Efe vía telefónica desde Reino Unido que “el hecho de que no se viera nada no significa que no se produjera el impacto. La razón pudo ser la pobre visibilidad debido a las nubes y la lluvia”, anotó Wickramasinghe, que también estaba siguiendo la trayectoria del objeto espacial.
Investigadores de la Universidad alemana de Stuttgart tenían previsto seguir la entrada en la atmósfera y el posterior impacto del WTF1190F desde el aire, al instalar instrumentos de seguimiento en una avioneta, según la ESA, aunque se desconocen todavía los resultados.
Desde las 10:00, hora local (01:00 en Paraguay), hasta las 14:00 horas (05:00 en Paraguay), se impuso la “prohibición de volar, pescar y navegar en un diámetro de 45 kilómetros” a la redonda del punto donde estaba previsto el impacto, señaló a Efe el portavoz de la Marina de Sri Lanka, Akran Alavi.
La jefa del Servicio Aéreo de Sri Lanka, Krishanthi Thisera, había afirmado ayer que los vuelos del aeropuerto internacional de Bandaranaike, cerca de Colombo, no se verían afectados por el objeto espacial, y que solo algunas rutas iban a ser modificadas.
El objeto fue descubierto en 2013 por “Catalina Sky Survey”, un programa operado por el Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona que utiliza datos de tres telescopios para buscar cometas, asteroides y objetos próximos a la Tierra. En cuanto a lo que es, la ESA dice que es un objeto “bastante especial” ya que probablemente está hecho por el hombre.
En este sentido, Emmet Fletcher, portavoz de la ESA en España, había explicado a Efe que de lo que sí están bastantes seguros es de que no se trata de un asteroide, sino muy posiblemente de un resto de una misión lunar. Fletcher recordó que en el espacio orbitan más de 600.000 objetos de basura espacial de entre uno y diez centímetros (20.000 son más grandes de diez centímetros).