«Carlos Saguier no volvió a filmar otra película; se dedicó a pulir su gran obra hasta el final y supo hacer del work in progress un sello oculto que actualiza el subtexto de la historia y el lugar de su película en la Historia, en una especie de palimpsesto cinematográfico que acumula capas de tiempo y espacio. Lo recordaremos siempre con ese gesto que eleva al máximo la frase godardiana: “Uno siempre hace la misma película”», escribe el cineasta Hugo Giménez.
Los restos de Damiana Kryygi son los restos de todos los aché exterminados en un genocidio que comenzó el 12 de octubre de 1492, reflexiona el cineasta Hugo Giménez en este artículo que, a propósito del documental de Alejandro Fernández Mouján, expone la historia de una comunidad que ha acusado de manera particularmente trágica las peores consecuencias de la colonización de América, prolongadas hasta el presente.