Total indignación causa ver cómo “desplumaron” a personas humildes que de la noche a la mañana se encontraron pagando deudas que no contrajeron, a causa de pagarés que no firmaron o que ya abonaron. La duda que nos invade a casi todos es que se pueda llegar hasta los verdaderos responsables, a los criminales de guantes blancos.
En medio de los peores escenarios siempre están los que defienden lo indefendible, los que justifican las malas acciones, los que minimizan las cosas que “todos hacen” y no suelen ser pocos. Puede ser una cuestión de duda real o de mala fe, pero siempre están los que se dedican a sembrar la duda.
El asesinato del teniente coronel Guillermo Moral deja una vez más en evidencia que ser honesto o denunciar la corrupción, tiene graves consecuencias que hasta cuestan la vida. Los casos de sicariato que veíamos hace unos años en las lejanas ciudades de las fronteras, hoy son la nueva realidad de la capital.
El cambio de camisetas es una costumbre común en el fútbol. Anteriormente, se generaba un escándalo momentáneo cuando un futbolista pasaba a las filas del tradicional rival, pero la profesionalización del deporte calmó un poco más esa reacción. Un ambiente parecido, pero menos digno, al de los que fueron votados como alternativa, pero se acomodan a las antiguas costumbres cuando apenas prueban el poder.
Ladislao Kubala fue un futbolista y entrenador extraordinario. Y aunque poco se hable de él, muchos afirman que durante su trabajo en la Selección Paraguaya se gestó una nueva mentalidad en los futbolistas nacionales, los mismos que después de 12 años lograron volver a un mundial en 1998.
No existe institución política que se jacte más de su ejercicio democrático que el Partido Colorado, sus miembros en diferentes épocas siempre se engalanaron del discurso de que la voluntad popular es lo más importante porque brinda legitimidad a un gobierno o institución.
Después de conocer a diferentes tipos de negacionistas, como los antivacunas, los que aseguran que el cambio climático es un invento y los terraplanistas, ahora nos sorprendió un nuevo grupo que trata de negar lo evidente, los negacionistas del abucheo a las autoridades.
