La audiencia se realizó el viernes pasado en el Juzgado Penal de Garantías, a cargo del juez Gustavo Ovelar. Participaron el abogado defensor del procesado, el abogado querellante Dionisio Piñánez, y el padre de María Fernanda, Leonardo Benítez Acosta, quienes prestaron conformidad con la disposición judicial.
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La fianza ofrecida consistió en un inmueble perteneciente a la familia del procesado, valuado en G. 1.000 millones, que fue presentado como garantía para que el imputado continúe sujeto al proceso penal.
El Ministerio Público no participó de la audiencia, pero fue debidamente notificado de la resolución judicial que beneficia al encausado.
Por su parte, los fiscales que llevan adelante la investigación, Fermín Segovia y Gloria Rojas, continúan aguardando los resultados del peritaje del teléfono celular de María Fernanda Benítez, cuyos datos serían clave para reconstruir los hechos y avanzar en el esclarecimiento del crimen.