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La resolución Nº 671/2023 del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) prohíbe la pesca comercial desde el 1 de noviembre hasta el 31 de enero de 2024, en aguas compartidas con el Brasil, por lo que por 90 días se paraliza esta actividad en la zona norte del gran pantanal.
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No solo la prohibición de venta de peces afecta a los pobladores de esta región; numerosas personas de la zona ribereña también se verán afectadas por la paralización del turismo, en todo este tiempo de veda.
Del turismo de pesca dependen numerosas familias de las comunidades del departamento, atendiendo que muchas personas trabajan en las embarcaciones que suelen transportar a los turistas por la zona del pantanal, otros son vendedores de carnadas, y también están los dueños y trabajadores de los albergues u hospedajes.
Por de pronto, se permite la pesca de subsistencia desde la orilla del río, sin que esto signifique la venta de pescados.
En todo el Alto Paraguay existen numerosas asociaciones de pescadores y afines, siendo una 800 las personas que perciben el subsidio estatal, en su gran mayoría pescadores de poblaciones indígenas como los maskoy, ishir, tomarahos y ayoreos.
Escases de peces
En dialogo con los pescadores, sobre todo de las poblaciones indígenas, los mismos se quejan de la escasez de peces, alegando que cada año se puede notar una gran disminución, haciendo realmente difícil la tarea, lo que repercute en la economía de la familia.
Los pescadores mencionan que una de las posibles causas podría ser la contaminación de los campos ganaderos, atendiendo que cada vez se utilizan con más frecuencia los productos químicos, para la eliminación de las malezas, y cuando se producen las grandes lluvias, el agua se encarga de llevar al río estos venenos, alegan.
Mencionan que es de suma importancia el cumplimiento de la veda pesquera, y a pesar de ser por 90 días, ayuda a evitar la extinción de los peces, “por eso todos estamos comprometidos a cumplir esta prohibición”, aseguran.
Controles
El control para que se respete la resolución de veda pesquera se torna bastante complicado en este departamento, esto debido a que la prefectura naval cuenta con pocos efectivos en los diferentes puestos ribereños, que difícilmente podrán abarcar todo la extensa zona.
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Sin embargo el cumplimiento de prohibición de la pesca comercial se cumple en el mayor porcentaje, no por el hecho de vigilancia de nuestros efectivos militares, sino porque los pescadores respetan la presencia de policías federales del vecino país, quienes patrullan la zona, tanto por agua como por aire, a bordo de helicópteros.
Estos por lo general suelen ingresar a aguas correspondiente a nuestro territorio, de allí el temor de ser sorprendidos por estos agentes, ya que en varias ocasiones se sucedieron hechos donde compatriotas fueron aprehendidos y llevados a penitenciarías del vecino país.
Reproducción de peces
Los técnicos del Mades aseguran que en esta época del año los peces se encuentran en etapa reproductiva, gran cantidad se concentran en esta zona del pantanal, considerada prácticamente la naciente del río, donde suben para desovar y así asegurar la reproducción.
Por esta razón es de suma importancia el cumplimiento de la veda, al no realizar la pesca comercial, ya que así se estará asegurando la repoblación de peces en las aguas del río, lo que asegurará la supervivencia de las personas que dependen de esta actividad.
