Cargando...
En esos casos, hay que enseñar a los canes a quedarse solos, y ha de hacerse con paciencia y despacio, paso a paso.
El entrenamiento puede comenzar con el dueño yéndose a otro cuarto y cerrando durante un momento corto la puerta. Una vez que el animal logre estar relajado durante medio minuto sin su dueño, se puede ir aumentando el tiempo de separación poco a poco.
Cuando diez minutos de soledad dejen de ser un problema, se podrá ya abandonar la vivienda sin el perro. Pero el tiempo que se le deje solo en ella debe ir aumentando solo lentamente.